miércoles, 18 de marzo de 2009

Causas y principios del proceso de Regionalización

Durante los años 1939 y 1973, el estado poseía un alto grado de control sobre la economía y los servicios a través de una administración pública centralizada, esto condujo a una serie de problemas:

1. Desigualdad: El poder político y económico estaba concentrado en la capital, lo cual generaba diferencias de oportunidades con las provincias, creándose una fuerte migracion del resto de la población del país hacia Santiago, generándose cesantía y sub-empleo.

2. Desequilibrio poblacional: Muchas zonas del País estaban practicamente deshabitadas lo que no permitía una correcta explotación de los recursos naturales y un problema mayor de seguridad nacional, al no estar estas zonas fronterizas bajo el resguardo de asentamientos humanos significativos.

3. Rigidez: Al concentrarse la totalidad del poder en la capital del país, la gobernabilidad de las provincias era practicamente nula, por lo que el Estado central tomaba muchas veces decisiones unitarias para toda la nación. Al ser Chile un país de marcadas diferencias en su geografía, muchas de las políticas públicas eran ineficientes ya que no se adecuaban a la realidad de cada provincia.

4. Politización: Los recursos del Estado eran destinados muchas veces según criterios políticos, favoreciendo a las provincias con mayor población en desmedro de otras.

5. Burocracia: Al estar la toma de decisiones en la Capital, las necesidades de cada provincia debián ser evaluadas bajo el poder central, lo que hacia de la implementación de medidas un proceso lento, sobre todo para los sectores mas alejados.

Esto lleva al Gobierno en el año 1974 a través de la CONARA a implementar un nuevo proceso de ordenamiento territorial llamado Regionalización, el cual debía regirse según los siguientes principios:
En primer lugar, era necesario establecer un desarrollo equilibrado entre el aprovechamiento de los recursos, la distribución de la población y el resguardo de la seguridad nacional. En segundo término, se debía garantizar la participación real y efectiva de la población en la definición de su propio destino. En tercer lugar, había que asegurar la igualdad de oportunidades para que se alcanzaran los beneficios aportados por el desarrollo económico y social. Finalmente, debía garantizarse un equilibrio fronterizo bien definido en el que sus habitantes pudieran vivir y prosperar en armonía y tranquilidad.

Por lo que se divide el país en 13 regiones debiendo ser estas una unidad geográfica característica constituida por factores físicos, sociales y económicos más o menos comunes. Requiriendo de una unidad territorial claramente definida, debiendo contar con una dotación de recursos naturales suficientes para hacer su aporte singular al proceso de desarrollo nacional y, además, contar con una población en número y estructura capaces de impulsar el desarrollo constituyéndose en una fuerza de trabajo y como mercado de consumo, siendo necesaria la existencia de un adecuado nivel de servicios públicos y privados aptos para satisfacer las demandas locales y aportar a los requerimientos a nivel nacional. Debiendo existir en cada región una ciudad capital que actúe como núcleo central de las actividades económicas y sociales, orientando la dinámica de crecimiento local.
Jaime López

Fuentes:
Reforma Administrativa Integral de Chile y el Proceso de Regionalización. http://www.subdere.gov.cl/1510/article-68995.html
Proceso de regionalización, descentralización y desconcentración en Chile. http://www.subdere.gov.cl/1510/article-69021.html
La Regionalización : una modernización para desarrollar el país. http://www.subdere.gov.cl/1510/article-68994.html
M. Errazuriz, J, González, R. Rioseco. Manual de Geografía de Chile. Editorial Andrés Bello - 1987 Santiago, Chile